El cuadro que veis es de Bouguereau. Pintor contemporáneo a los impresionistas. Todo el mundo conoce a Monet, Cézanne, Renoir o Degas que exponían en salones paralelos por no ser admitidos en los salones oficiales. Sin embargo Bouguereau es bastante desconocido actualmente. Sus obras realistas y de temas mitológicos eran expuestas en el Salón anual de París y tuvieron enorme éxito. La mayor parte de ellas las adquirieron sobre todo, norteamericanos adinerados. Sin embargo con el tiempo fue cayendo en el olvido debido al auge de otros estilos artísticos, como el de los impresionistas.
El hecho de que escritores como Zola y marchantes como Paul Durand-Ruel apostaran por el nuevo arte revolucionario permitió el éxito del Impresionismo. Llegando a brillar tanto que ocultó a artistas con talento y creatividad.
Sin quitar valor al Impresionismo quiero reivindicar a los pintores con oficio. Las modas son pasajeras y el gusto no ha de ser impuesto por autoridades artísticas del momento o especuladores del arte que sólo les interesa el negocio y hacen del “tanto tienes tanto vales” la fórmula para valorar una obra. El arte actual es, en mi opinión, otra de las burbujas del sistema. El valor artístico no tiene nada que ver con su cotización.
Recomiendo este artículo de Rafael Argullol ARTE ENTRE TIBURONES de EL PAÍS.
1 comentario:
Me encanta cuando coincido con alguien que opina lo mismo que yo...
P.D.: Pero aveces también me gusta discrepar
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